“La vejez es sólo un registro de toda la vida” dijo Muhammad Ali. Esta frase deberíamos de tatuárnosla todos los que tenemos (o no) mascotas. Y es que dependiendo de los cuidados y calidad de vida que les hayamos proporcionado en los años anteriores, tendrán una mejor o peor vejez.
La pregunta que te estarás haciendo es la siguiente: ¿Con qué edad se considera a un perro anciano? Te estaríamos engañando si nuestra respuesta recurriese a la archiconocida fórmula de los 7 años (multiplicar la edad del animal por siete para obtener su “edad humana”). Además, ¿cuándo se considera que un hombre o una mujer entran en su etapa de vejez? Este sería un asunto que nos llevaría seguramente a otro debate.
La duda la seguimos teniendo y es probable que no vayamos a resolverla nunca (ya sabes, la vejez es muchas veces cuestión de actitud), pero podemos sacar una idea aproximada si tenemos en cuenta cierta información.
Lo primero es saber que la esperanza de vida de los perros depende de muchos factores, entre ellos, el tamaño, el peso, la raza, su alimentación, su estilo de vida y los cuidados que le demos. Y lo segundo (y lo más seguro es que no resolvamos ningún misterio) es que en general, los perros de raza grande viven menos años (entre 8 y 10) que los de raza pequeña (que pueden alcanzar hasta los 20 años) y que los mestizos son más longevos que los de pura raza.
Por tanto, y sin ser concluyentes, podemos decir que nuestro peludo ya es un anciano a los 6-7 años cuando es de gran tamaño y a los 15-16 cuando es pequeño.
¿Cuáles son los síntomas de envejecimiento?
Ciertos cambios físicos y de conducta nos darán pistas sobre el salto de la adultez a la ancianidad en nuestro animal.
A nivel físico podemos distinguir:
- Reacciones alérgicas
- Piel más sensible
- Uñas más frágiles (pudiendo crecer más de lo normal)
- Aparición de canas en el hocico y alrededor de la boca
- Pelo más áspero, pérdida de brillo o cambios de color
- Pérdida de olfato o audición
- Cambios en el metabolismo
- Pérdida de masa muscular
A nivel conductual algunas capacidades se reducen pudiendo provocar:
- Tardanza a la hora de reaccionar
- Desorientación
- Trastornos del sueño
- Gruñidos
- Demencia senil canina
La protección de nuestra mascota es nuestra responsabilidad por lo que tenemos que prestar especial atención a ciertas enfermedades que pueden aparecer en estas edades. Algunas de las más comunes son:
- Problemas respiratorios
- Problemas cardíacos
- Artrosis
- Artritis
- Enfermedades renales o incontinencia,
- Enfermedades intestinales o digestivas
- Flatulencias
- Pérdida del control del esfínter
Existen otras numerosas formas de cuidar a nuestros peludos más mayores, ¿cómo podemos hacerlo?
Expertoanimal nos recomienda algunas actividades que podemos realizar con ellos. Pasear cada día (no tienen porque ser paseos muy largos), apuntarles a clases de natación (actividad que relaja además de fortalecer los músculos) o realizarles masajes que les hagan sentir cómodos y queridos, son algunos de ellos.
En Dog Lovers ponemos especial atención a nuestros mayores. Disponemos de una bañera hidráulica para facilitarles el acceso cuando son mayores o tienen problemas de movilidad. Además, el baño con ozono supone un beneficio muy importante para tratar la mayoría de los problemas que les afectan.
Recomendamos también los distintos tratamientos contra la dermatitis, la artrosis, cicatrizantes, bactericidas… que acompañados de un pequeño masaje aportan un plus de bienestar.
¡Todo por y para ellos!
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