Imaginemos por un momento esa situación que es un sueño para muchos: un cachorrito, suave y adorable como pocos, acaba de llegar a nuestro hogar para llenarlo de alegría (y de algún que otro arañazo en el parqué, mordiscos en los muebles y pis en el suelo, pero eso es lo de menos). Al principio todo será nuevo, para él y para nosotros, y habrá muchas cosas que debemos incorporar a sus rutinas para favorecer un crecimiento sano y feliz del nuevo miembro de la familia.

Dentro de estas rutinas y cuidados hay un aspecto al que debemos prestar especial atención: el cuidado de su pelaje. Como habréis podido comprobar, en sus primeras semanas de vida el pelo que cubre su piel es extremadamente suave y gustoso. Pero para poder mantener un pelo sano, fuerte y suave en la medida de lo posible, es necesario seguir algunas recomendaciones.

La primera es fácil, ¡no dejes de acariciarlo!

No debemos tener prisa en bañar o cortar el pelo a nuestro pequeño, pero es muy importante acostumbrarle durante las primeras semanas para que se familiarice y no tenga miedo o incluso fobia en un futuro. La peluquería deberá ser algo cotidiano y a ser posible placentero para nuestro pequeño amigo, y lo mejor es empezar en casa, donde el perro se sentirá más protegido y relajado.

Para ello podemos subir a nuestra mascota a una mesa y tocarle por todo el cuerpo, pasarle la mano por el lomo, manipularle las patas y las uñas, acariciar su cola… Si vemos que lo acepta con normalidad, pediremos a otra persona que haga el mismo procedimiento, y de esta manera conseguiremos que se acostumbre a este tipo de contacto.

Siguiente paso: un buen cepillado

Una vez que nuestro amigo ha establecido una buena relación con los miembros de su nueva familia y está habituado a que le toquen y le acaricien por todo el cuerpo, podemos introducir el cepillado. Para ello es importante utilizar un cepillo adecuado a su tipo de pelo y raza (en Dog Lovers tenemos todos los que necesitas, ¡pregúntanos!).

El cepillado debe ser diario, de forma que nuestra mascota lo entienda como algo cotidiano, y llevarse a cabo cuando esté relajado, tumbado a nuestro lado y tranquilo, no como un castigo sino como algo placentero. Si se realiza con cuidado pero con firmeza, lograremos ayudarle a desprenderse de los pelos muertos y a regenerar su pelaje, además de lograr que luzca más brillante y saneado.

¡Al agua patos!

La primera cita con el baño debe considerarse como una introducción al mundo del aseo perruno, tanto para el cachorro como para el dueño. No es recomendable bañar a nuestro cachorro hasta que no tenga todas las vacunas, por ello lo mejor es empezar a partir de las 12 semanas. En todo caso, la primera vez debe considerarse como lo que es, una toma de contacto. Meteremos a nuestro peludo amigo en la bañera y lo mojaremos con agua templada, mientras lo acariciamos y le hablamos, para que sepa que estamos junto a él y no le vamos a dejar solo. Podemos premiarlo cuando haya aprendido a quedarse tranquilo y relajado.

Hora de secar y cortar

Por último, llegamos a la parte del secado y corte del cabello de nuestro can. La primera vez es mejor que no sea una sesión completa si el cachorro está tenso, y además, debemos tener en cuenta que estaríamos pidiendo a un cachorro quedarse quieto y dejarse manipular durante cerca de una hora. ¿Te imaginas pedirle a un niño pequeño que se siente quieto durante una hora? Pues esto sería algo parecido.

Pero sí existen algunos procedimientos que podemos llevar a cabo para que vaya familiarizándose con el cuidado y la higiene de su pelaje. Por ejemplo, enseñarle las tijeras y que se acostumbre a ellas alrededor de la cara, o recortarle los pelos de las almohadillas o alrededor del ano. Con el secador haremos lo mismo, dejaremos que lo vea y lo encenderemos y apagaremos para que se familiarice con el ruido.

 Dependiendo de cómo reaccione el cachorro a estas primeras tomas de contacto, podemos continuar con estos pequeños retoques o llevarlo a un centro especializado como Dog Lovers a cortarle el pelo completo.

En nuestra peluquería de Retiro seguimos muy de cerca las necesidades en cada periodo de vida de nuestras mascotas; y la iniciación a la peluquería para nuestro pequeño amigo  es primordial,  pues depende de ello el que tenga una mejor socialización, higiene y salud en un futuro. Así que no dejéis de contactarnos para conocer nuestros tratamientos.  Siempre os recomendaremos  el más adecuado para su pelaje y, por supuesto, ¡para  su carácter!